La tabla de embutidos y queso es un picoteo ideal adaptable a cualquier número de invitados y es tan fácil de preparar que siempre queda estupenda. Además, suele gustar a todo el mundo. El único secreto para su éxito es escoger productos de buena calidad, a partir de ahí y siguiendo una propuesta de presentación como la que explicamos en esta receta, el éxito de este aperitivo está garantizado.
A nosotros nos gusta escoger diferentes embutidos, en cuanto a sabor y textura, y añadir al menos un par de quesos también diferentes, por ejemplo uno curado y uno cremoso, ya que esto aporta un contraste de sabores y texturas muy interesante.
Para hacer esta tabla de embutidos que os presentamos a continuación hemos elegido jamón ibérico, chorizo, salami, jamón cocido, mortadela, fuet, queso manchego y queso brie, aunque se puede preparar con cualquier tipo de embutido a vuestra elección. Por ejemplo, el lomo o el salchichón también quedan fenomenal. Para acompañar, hemos optado por unos colines de pan, tomates cherry y aceitunas, aunque otras opciones serían tostaditas, frutas —como higos, fresas o uvas—, frutos secos, como nueces o almendras, o encurtidos.
Nos gusta repartir los ingredientes escogidos de manera que se puedan coger con facilidad, por eso, separamos las lonchas de todos los embutidos y los presentamos de manera sencilla y cada uno dispuesto de forma diferente, creando una tabla con volumen, ya que con la vista también comemos. Como veis, en esta receta no hemos indicado cantidades ya que estas son totalmente adaptables a la cantidad de invitados y a si queremos un aperitivo ligero, uno más contundente o si vamos a presentar la tabla de embutidos como parte de una comida de picoteo. A modo de referencia, para hacer la tabla de embutidos que hemos preparado en esta receta hemos usado 300 g de embutidos y una cuña pequeña de 200 g de cada queso.
Tened en cuenta que podéis preparar esta tabla de embutidos con antelación —sin los complementos como las aceitunas, los tomatitos y los palitos de pan— y reservarla en la nevera tapada hasta 1 hora antes de servir, ya que es necesario sacarla con un poco de antelación puesto que los embutidos fríos pierden todo su sabor, por ello es mejor degustarlos atemperados.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo total: 15 minutos
- Raciones: 6
- Categoría: entrantes
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 465
Ingredientes de la tabla de embutidos
- Aceitunas verdes y/o negras (para acompañar)
- Queso manchego
- Queso brie
- Jamón serrano o ibérico
- Chorizo
- Salami
- Jamón cocido
- Mortadela
- Fuet
- Tomates cherry (para acompañar)
- Colines, tostadas o rebanadas de pan (para acompañar)
Cómo hacer una tabla de embutidos
Colocamos primero un cuenco con las aceitunas elegidas. Si vais a servir encurtidos, ponedlos también en un cuenco. Nosotros hemos colocado también en este punto un botecito con palillos para que cada invitado pueda servirse el aperitivo que desee sin necesidad de tocarlo con las manos, aunque esto es opcional.
Repartimos el queso manchego cortado y superpuesto y el queso brie en lonchas apiladas en otro lado diferente de la tabla. En la siguiente imagen mostramos una sugerencia de presentación.
Colocamos entonces los embutidos elegidos, de diferente manera y formando volumen, con las lonchas separadas. En nuestro caso, hemos elegido jamón ibérico, chorizo, salami, jamón cocido, mortadela y fuet.
Rellenamos los huecos libres con los tomates cherry, previamente lavados y secados, y los colines de pan.
Y ya tenemos nuestra tabla de embutidos lista para servir.
Resumen fácil de preparación
- Disponemos los ingredientes que van en cuencos, en nuestro caso, las aceitunas
- Colocamos el queso manchego y el queso brie troceados y en lados diferentes
- Repartimos el jamón ibérico, el chorizo, el salami, el jamón cocido, la mortadela y el fuet agrupados y con las lonchas separadas formando volumen
- Rellenamos los huecos con tomates cherry y colines de pan
- Servimos esta tabla de embutidos y queso casera
