
El carbonade flamande es una especialidad belga que podría traducirse como «estofado flamenco» o «carbonada flamenca». Esta receta consiste en un estofado tradicional típico de Flandes, Bélgica, y de algunas regiones del norte de Francia, que se cocina a fuego lento con cerveza belga y cebolla, entre otros ingredientes, dando como resultado un guiso rico en matices y con un interesante equilibrio entre sabores dulces y amargos.
El secreto del sabor único de este guiso, también llamado carbonnade flamande, stoofvlees o stoverij, radica en la cerveza utilizada, que puede ser más o menos amarga según preferencias. Para contrarrestar esas notas amargas de la cerveza, hemos añadido vinagre y un poco de azúcar moreno que, además, aportarán profundidad y complejidad al plato. Además, hemos añadido un bouquet garni, una mezcla de hierbas aromáticas compuesta por laurel, tomillo y romero, para conseguir un resultado más sabroso. Un poco de caldo asegura que, durante las tres horas de cocción, la carne se mantenga jugosa y la salsa adquiera una textura tierna y sabrosa perfecta.

Uno de los ingredientes más característicos de la carbonade flamande es el pan de especias untado con mostaza que se incorpora al guiso para espesar la salsa y que, con la cocción lenta, termina por integrarse en la elaboración dando como resultado un plato muy sabroso. En nuestro caso, hemos elegido mostaza de Dijon, que aporta un sabor inconfundible. Para esta receta, hemos optado por preparar el pan de especias casero, aunque también puede utilizarse uno comprado. Si no encontráis este ingrediente, podéis utilizar otro pan, aunque en este caso, sería recomendable añadir un extra de especias al guiso, como canela, clavo o anís para conseguir un perfil aromático similar.
Para un acabado aún más especial, especialmente recomendable si optáis por añadir una cerveza rubia, es añadir una onza de chocolate negro que intensificará el color y aportará brillo a la salsa. Aunque este paso es opcional, este es un truco que muchos cocineros utilizan para dar un toque de profundidad extra a este plato.
Este guiso es perfecto para preparar con antelación, ya que su sabor se intensifica con el reposo en la nevera. Tradicionalmente, se sirve acompañado de patatas fritas, aunque también queda delicioso con un parmentier de patata. Este es un estofado reconfortante, lleno de historia y tradición, que merece la pena descubrir y disfrutar.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 3 horas
- Tiempo total: 3 horas y 15 minutos
- Raciones: 6
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: belga
- Calorías por ración (kcal): 694
Ingredientes del carbonade flamande
- 1 kg de carne de ternera para estofar (morcillo)
- Sal
- Pimienta recién molida
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 200 g de bacon
- 3 cebollas grandes
- 1 cucharada de azúcar moreno
- 1 cucharada de vinagre de vino blanco
- 1 bouquet garni (1 hoja de laurel, 1 rama de romero, 3 ramas de tomillo)
- 5 lonchas finas de pan de especias
- 1 cucharada de mostaza de Dijon
- 600 ml de cerveza belga
- 400 ml de caldo de carne

Cómo hacer carbonade flamande
Para comenzar a preparar el carbonade flamande, salpimentamos 1 kg de carne de ternera para guisar (morcillo), cortada en tacos de tamaño regular.

Calentamos 20 ml de aceite de oliva virgen extra en una olla grande y, cuando esté bien caliente, añadimos la carne. La sellamos por tandas a fuego alto hasta que quede dorada por fuera, asegurando que conserve sus jugos en el interior. Retiramos la carne a una fuente y la reservamos.

Cortamos a tacos 200 g de bacon. Pelamos 3 cebollas grandes y las cortamos en juliana fina.

En la misma olla donde hemos sellado la carne, añadimos 30 ml más de aceite de oliva virgen extra y agregamos el bacon troceado. Lo doramos ligeramente y, a continuación, incorporamos la cebolla con una pizca de sal. Bajamos el fuego y dejamos que la cebolla se cocine lentamente junto con el bacon, durante unos 15 minutos o hasta que esté tierna y transparente, sin llegar a dorarse.

Añadimos de nuevo la carne a la olla, junto con 1 cucharada de azúcar moreno, 1 cucharada de vinagre de vino blanco y 1 bouquet garni que habremos hecho juntando con hilo de cocina 1 hoja de laurel con 1 rama de romero y 3 ramas de tomillo.

Untamos 5 lonchas finas de pan de especias con 1 cucharada de mostaza de Dijon, repartiéndola de manera uniforme.

Colocamos el pan de especias sobre el guiso, con la cara untada de mostaza hacia arriba.

Vertemos 600 ml de cerveza belga y 400 ml de caldo de carne, asegurándonos de que la carne quede bien cubierta por el líquido.

Tapamos la olla y dejamos que el estofado se cocine a fuego lento durante aproximadamente 2 horas y media, removiendo de vez en cuando para que los sabores se integren bien y la salsa espese.

Poco antes de terminar la cocción de la carne, preparamos unas patatas fritas y servimos el carbonade flamande bien caliente, acompañado de las patatas recién hechas.

Resumen fácil de preparación
- Salpimentamos la carne
- Sellamos la carne en aceite de oliva virgen extra y la reservamos
- Cortamos el bacon y la cebolla
- Pochamos la cebolla con el bacon
- Incorporamos la carne, el azúcar, el vinagre y el bouquet garni
- Untamos el pan de especias con la mostaza
- Incorporamos al guiso el pan con mostaza
- Vertemos la cerveza y el caldo de carne
- Guisamos el estofado durante unas 2 horas y media a fuego lento
- Servimos el carbonade flamande acompañado con patatas fritas


















