
El estofado de pollo es una receta casera muy sencilla y reconfortante que resulta ideal para preparar con antelación ya que gana en sabor si lo dejamos reposar de un día para otro en la nevera. Con el reposo, los sabores se asientan a la perfección y el resultado es especialmente gustoso. Incluso podemos duplicar cantidades y congelarlo, así otro día tenemos ya una comida solucionada sin ningún esfuerzo.
La mejor opción para esta receta es usar partes de pollo con hueso y piel, ya que dan más sabor al conjunto. Nosotros hemos optado por cuartos traseros troceados, muslos y contramuslos, aunque también se podría utilizar perfectamente un pollo entero troceado a cuartos u octavos, o incluso, solo muslos según preferencias.
Las verduras que solemos añadir a este guiso son cebolla, ajo, apio, zanahorias, tomates y guisantes. Otras veces usamos puerro en lugar de cebolla o añadimos unos champiñones troceados o unas patatitas peladas. Solemos usar tomates en conserva por comodidad, aunque los frescos, rallados o troceados, quedan también muy ricos. Si optáis por esta última opción, en caso necesario, podéis rectificar la acidez del tomate añadiendo un poco de azúcar.
En esta receta hemos optado por usar vino blanco para dar sabor al conjunto, aunque el moscatel también queda fenomenal en este estofado ya que aporta un toque distinto al pollo. Si preferís no usar alcohol, aumentad entonces la cantidad de caldo.
Este estofado de pollo lo servimos con pan para mojar en la salsa, ¡no puede faltar! También podéis servir menos cantidad de pollo y acompañarlo de arroz hervido o pasta cocida. Una ensalada mixta es también una buena elección para una comida más ligera.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 55 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 5 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 720
Ingredientes del estofado de pollo
- 500 g de pollo troceado (con piel y hueso)
- Sal
- Pimienta negra molida
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cebolla
- 1 rama de apio
- 1 diente de ajo
- 2 zanahorias
- 100 ml de vino blanco
- 200 g de tomates en conserva
- 100 ml de caldo de pollo
- 30 g de guisantes congelados
- 1 cucharada de hojas de perejil

Cómo hacer estofado de pollo
En primer lugar, doramos 500 g de pollo a trozos previamente salpimentado en una cazuela con 2 cucharadas de aceite de oliva.

Añadimos a la cazuela 1 cebolla picada, 1 rama de apio cortada en trozos pequeños, 1 diente de ajo prensado y 2 zanahorias lavadas y cortadas a rodajas. Removemos y sofreímos durante 10 minutos a fuego medio.

Vertemos 100 ml de vino blanco sobre las verduras y dejamos reducir 5 minutos.

Agregamos 200 g de tomates en conserva, 100 ml de caldo de pollo, llevamos a ebullición y cocinamos el conjunto, destapado y a fuego medio, durante 25-30 minutos, hasta que el pollo esté completamente cocinado, tierno y la salsa ligeramente espesa. En los últimos 5 minutos, añadimos 30 g de guisantes congelados.

Para terminar, agregamos 1 cucharada de hojas de perejil picadas, salpimentamos el estofado de pollo al gusto y servimos inmediatamente o bien, lo reservamos una noche en la nevera una vez se haya atemperado para que los sabores se asienten ya que, como suele pasar con todos los guisos, este estofado de pollo gana en sabor cuando se toma al día siguiente.

Resumen fácil de preparación
- Doramos el pollo durante unos minutos
- Incorporamos la cebolla, el apio, el ajo y las zanahorias y cocinamos el conjunto 10 minutos
- Añadimos y dejamos reducir el vino
- Agregamos el tomate en conserva y el caldo, y cocinamos el estofado de pollo durante 25-30 minutos
- Condimentamos el estofado de pollo con perejil y lo servimos o lo reservamos en la nevera hasta el día siguiente para que se asienten los sabores



















