
Como toda receta de la cocina casera más tradicional, la llamada popularmente cocina de la abuela, cocinar un buen arroz tiene sus trucos, aunque una vez conocidos, es pan comido. En esta ocasión, haremos un arroz tradicional con pollo, un plato sencillo que queda especialmente sabroso si conseguimos dejarlo en su punto, como explicamos a continuación.
Hay que tener en cuenta que el pollo es un ingrediente que debe cocinarse perfectamente antes de su consumo. Por ello, lo primero que haremos para preparar esta receta será dorar muy bien los trozos de pollo, para que estén prácticamente hechos cuando los pongamos a cocer con el arroz y no se queden crudos por dentro. Dependiendo de la parte del pollo que escojamos, y según lo grandes que sean los trozos, tardará más o menos en cocinarse: en esta ocasión, hemos optado por alas y contramuslos con el hueso que hemos necesitado dorar durante unos 10-15 minutos.
Para que el arroz quede bien sabroso, vamos a prepararlo sobre un buen sofrito como base para el que podemos utilizar las verduras que más nos gusten. En mi caso, la cebolla es imprescindible, aunque la chalota o el puerro también van fenomenal en este plato.

Otro de los aspectos importantes para que este plato quede perfecto es utilizar la variedad adecuada de arroz y rehogarlo unos minutos en el sofrito antes de cocerlo. De esta forma, conseguiremos que el grano quede suelto y entero con todo el sabor del pollo. Un buen caldo de pollo casero, o comercial de buena calidad, consistente y con mucho sabor también ayudará a conseguir un resultado delicioso.
Por último, un aspecto fundamental en esta receta es medir bien la proporción de líquido y arroz. Para un arroz seco pero jugoso, como el que os presentamos hoy, dos partes de caldo por una de arroz será suficiente, aunque siempre es recomendable tener un poco más de caldo caliente reservado porque no todos los arroces se comportan igual y podría necesitar más.
El reposo tras la cocción ayudará a que el arroz absorba lo que quede de líquido y quedará en su punto, tierno y suelto. ¡Sírvelo recién hecho! Tu familia te hará la ola.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 35 minutos
- Tiempo total: 40 minutos (más 5 minutos de reposo)
- Raciones: 4
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 644
Ingredientes del arroz con pollo
- 700 g de pollo troceado
- Sal
- Pimienta negra molida
- Aceite de oliva virgen extra
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- ½ pimiento rojo
- 1 zanahoria grande
- 100 ml de vino blanco
- 1 cucharadita de tomate concentrado
- Unas hebras de azafrán
- 400 g de arroz redondo
- 100 g de guisantes
- 1 litro de caldo de pollo
- 1 ramita de perejil fresco

Cómo hacer arroz con pollo
Comenzamos salpimentando 700 g de pollo troceado. Lo cocinamos a fuego medio en una cazuela ancha con una lámina de aceite de oliva virgen extra, girando los trozos de pollo hasta que estén bien dorados por todas partes y al pincharlos el jugo salga transparente. Retiramos a un plato y reservamos.

Mientras se hace el pollo, picamos muy finamente 1 cebolla y 2 dientes de ajo, y troceamos en cubitos ½ pimiento rojo y 1 zanahoria grande.

Sofreímos las hortalizas en la cazuela con el mismo aceite de dorar el pollo, empezando por la cebolla y el ajo. Cuando estén translúcidos, añadimos el pimiento y la zanahoria y los rehogamos hasta que empiecen a ablandarse.

Mezclamos 100 ml de vino blanco con 1 cucharadita de tomate concentrado y unas hebras de azafrán. Lo añadimos a la cacerola y subimos el fuego, removiendo hasta que se evapore el líquido.

Agregamos entonces 400 g de arroz redondo, bajamos el fuego a temperatura media y removemos durante un par de minutos, hasta que el arroz presente un aspecto nacarado.

Devolvemos el pollo a la cazuela junto con 100 g de guisantes congelados y 1 litro de caldo de pollo bien caliente. Removemos lo justo para que se mezcle todo bien, ajustamos de sal y en cuanto empiece a hervir bajamos el fuego.

Mantenemos el hervor sin remover durante 15 minutos, comprobando de vez en cuando si el arroz está demasiado seco. En ese caso, añadimos un vasito más de caldo o agua caliente. Transcurrido el tiempo de cocción, probamos el punto del arroz. Si lo notamos demasiado duro, lo dejamos al fuego uno o dos minutos más. Si el arroz está al dente, lo retiramos y lo dejamos reposar tapado con un paño limpio durante unos 5 minutos.

Tras el reposo, espolvoreamos el arroz con un poco de perejil fresco picado.

Servimos el arroz con pollo inmediatamente para disfrutarlo recién hecho.

Resumen fácil de preparación
- Doramos muy bien el pollo troceado y lo reservamos
- Troceamos las verduras del sofrito
- Sofreímos las verduras en la misma cazuela que el pollo
- Añadimos vino blanco, tomate concentrado y azafrán, y dejamos evaporar
- Incorporamos el arroz y lo rehogamos unos minutos
- Volvemos a incorporar el pollo en la cazuela, agregamos los guisantes y el caldo caliente
- Cocinamos el arroz durante 15 minutos aproximadamente y cuando esté listo, lo dejamos reposar 5 minutos
- Añadimos un poco de perejil picado
- Servimos el arroz con pollo recién hecho

























